martes, 16 de noviembre de 2010

Flamenco Soy

Sí, tal y como dice el título de este post, soy flamenca. Yo y otros miles más de personas, y hoy estamos orgullosos y de fiesta porqué somos patrimonio inmaterial de la humanidad, ¡qué se dice pronto!
He crecido entre el sonido de la guitarra de mi hermano y la pluma de mi padre por seguidillas, que no es porqué sea mi padre, pero respecto a la sevillanas Antonio Rodríguez Ferreras es uno de los grandes maestros. ¿O nadie conoce "Sueña la margarita", "Prepárate carretero" o "Lágrimas tengo en mis ojos"? entre tantas y tantas...
Recuerdo mi primera noche de camino, Cuatrovitas, cuando mi padre recibía la visita de el Turronero, Lola de los Reyes y alguno más que otros de los antiguos. Toda una noche de cantes rotos por sevillanas lentas. No he conocido después de más de diez años noche de camino igual.
Con siete años me subió mi padre en el escenario del Teatro de Capitanía, y bailé al son de las voces de Pepe "el berenjena" (al cual es imposible olvidar) y de mi querido Chano, aquello que cantaba la más grande:

No pasa una madrugá , ay
que no maldiga mi suerte
quisiera olvidarte
cuando estás ausente
y no puedo y yo me muero sólo por verte
y no puedo y yo me muero sólo por verte.

Esperando me quedé
anoche en mi balcón
solita me quedé con la luna...

Tengo muy cerca mía, para mí, la persona que más gusto y sentimiento tiene cantando de todas las voces que jamás he escuchado, y esa es la de mi tío Pepe. Nunca se me estremecido el cuerpo igual que con su garganta rota, entre cantando y recitando:
y de los mares, el coral con más brillo, para hacerte mi vida unos zarcillos...
Y como se dice por aquí por el sur, yo lo he "mamao" desde chica, y así he salido, que no cambio una noche de cante por nada del mundo. Disfruto cuando veo a alguien haciendo compás en una mesa con los nudillos, ¡no hay gesto más flamenco!. Y para compás el de Diego Carrasco. Para letras las de Manuel Molina, para temple el de la Niña de los Peines, pa´quejío el de Camarón, para grandeza Rocío Jurado, para son De Lucía,  para voz Caracol, nadie como Toronjo por fandangos, a las alegrías Tomate, pa la copla Pepe Pinto, para arte Lola Flores, ¿genío? Carmen amaya, y como el flamenco y el toreo van de la mano, créanme que no les miento, que no hay embrujo igual que el de Morante sentao en una silla de neja meciendo su capote. Me quedo con Poveda en las bulerías, para fusiones los Carmona, Arcángel es mi recuerdo de una noche trianera de abril, con olores a azahar, llenando cada rincón con una saeta a pie de paso.
Con esto quiero decir lo que para mí y una gran mayoría significa el flamenco. 

Flamenco son raíces, recuerdos y sentimientos...

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